«El Moncayo tiene su
triunvirato: El cardo,
las setas y la trufa»
La cocinera Charo Val apuesta
por el uso de los cultivos autóctonos.
E. SÁNCHEZ / Ágreda
Tras su paso por el Concurso de
Cocina con Trufa que tuvo lugar
la pasada semana en Soria, la cocinera
agredeña Charo Val,
apuesta por la puesta en marcha
de proyectos que logren potenciar
los productos autóctonos de
la comarca. No en vano, en esta
cita se elaboró un plato que incluía
una trufa de la zona «concretamente
recolectada en Moranas,
dentro del término de Ágreda
». La restauradora
afincada en Murcia sigue
apostando por los productos
de su lugar de origen
a los que ubica en lo
más alto de la gastronomía,
«el Moncayo tiene
su triunvirato: el cardo,
la trufa y las setas». El
primero de ellos muy conocido
pero los otros dos
«con grandes posibilidades
de desarrollo en la
comarca».
Val pasea los productos
de la villa por varias
ciudades españolas gracias
a la empresa de catering
que dirige, la Alacena
del Gourmet. De su mano,
el cardo rojo de Ágreda se pasea
por comidas, cenas y aperitivos
que se adentran en grandes empresas,
inauguraciones de edificios
públicos, actos institucionales
o celebraciones. Pero además
del cardo incide en que la trufa
debe convertirse en el próximo
producto en promocionar en la
zona. En su cocina ya hay platos
que utilizan este producto local
del Moncayo.
En su última visita a Ágreda,
recorre el pueblo con nuevas
ideas, sobre todo las que se acercan
al cultivo de las tan apreciadas
trufas, que ya cuentan con
sus primeras explotaciones promovidas
por agricultores de la
zona y que Val pretende introducir
en su cocina. «El noreste de
Soria, por su clima, cuenta con
un ecosistema favorable para el
cultivo de la trufa, sobre todo la
variedad Tuber Malanosporum,
tiene unos suelos pobres, con pocos
nutrientes que, apoyados por
las raíces de la encinas, garantizan
una producción óptima en
tamaño y cantidad».
No improvisa nada, «el cardo,
la seta y la trufa son productos
que valoramos mucho en gastronomía
y que están presentes en la
zona del Moncayo, promover el
cultivo de la trufa en nuestra comarca
supondría poner en marcha
aprovechamientos que sean
sostenibles ambientalmente, económicamente
y socialmente».






